jueves, 25 de octubre de 2007

Que se abra el debate...

¿QUÉ HACE EL PODER EN TU CAMA?
Quien haya reflexionado un poco sobre la masculinidad (felicidades a los hombres que lo hayan hecho, ya era hora) les gustará esta cita que leí en un libro muy interesante que se titula ¿Qué hace el poder en tu cama? de Josep Vicent Marqués, esto me lo recomendó Fernando Huerta un antropólogo que trabaja cuestiones sobre la masculinidad en Hombres por la Equidad y que además es catedrático de la Universidad de la Ciudad de México.
La siguiente cita la transcribo tal cual para que las personas que lean esto escriban lo que realmente piensan sobre este asunto y se pueda armar un debate rico, diverso e inteligente.

El problema de los fantasmas es mucho más grave. La mujer tiene una razonable demanda de que la relación sexual se encuadre en un contexto humanamente válido , bien porque quede englobada en algún tipo de afectividad, o bien, si es una relación sexual ocasional, que así quede, esto es, que no sea el varón quien incorpore a la relación sexual connotaciones negativas o expectativas de adquisición de derechos. Y aquí el varón por lo general se arma un follón con la afectividad negándola, eliminándola, pero también es incapaz, a menudo de disociar la afectividad de la propia concepción negativa y obsesiva que tiene de ella. Cuando una mujer acepta el "modelo masculino" de que la sexualidad no compromete a nada se encuentra la mayoría de las veces con que el mismo varón, que ha utilizado esa concepción como argumento, cree tener derechos post - coito o no ha superado cierto desprecio hacia la moza que ha aceptado "este tipo de relaciones"
Sin embargo, una cosa es exigir al varón garantías de que hay un mínimo de respeto, una consideración global y no objetual de la persona, y otra cosa es exigir un compromiso sentimental, aunque no sea exactamente el de la pareja.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Wow! Me parece que este autor ha dado en el clavo... ¿quiere decir que los hombres son los que no han podido superar que una mujer sea dueña de sì misma?... interesante... aunque no podemos dejar de lado que a muchas mujeres les sigue agradando que otros sean dueños de su cuerpo... pero ese es otro tema.

Yo conozco mujeres que han estado dispuestas a estar con un hombre en la cama sin ningún compromiso y sucede exactamente lo que dice el escritor: o resulta que el hombre sigue pensando que es algo que sólo una mujer de pocos principios se anima a ello, por lo tanto, no hay respeto... o al final trata de negarse a sí mismo que se ha enamorado de la chica... y si una mujer no es inteligente cuando se topa con tu tipo de estos, se conflictúa solita, haciéndola dudar de su propia independencia...

Dorix dijo...

Ahor comprendo todo en este mundo... ja ja ja.